Esperanza D’Ors

(Madrid, 1949)

Desnudo con abanico

1985

cemento teñido de negro

116 x 50 x 50 cm

Nº inv. 34675

Colección BBVA España



En su declaración de principios, esta artista –nieta de Eugenio D’Ors- manifiesta las dos líneas fundamentales de su trabajo como escultora: su compromiso y preocupación social y su interés por la figura humana, o mejor dicho por el humanismo. Frente a la deshumanización del arte contemporáneo, expresada de un modo paradigmático en la abstracción, la figuración supone un retorno a la tradición formal, aunque en su caso utiliza la figura como objeto de denuncia de la realidad social.

Su escultura no es realista, sino simbólica e idealista. Utiliza la figura humana como representación de su arte, alejándose de cualquier otro elemento figurativo animado o inanimado. Sus cuerpos esquematizados, desnudos, nos devuelven la dimensión simbólica de sus figuras, y se convierten en vehículo de denuncia de las lacras sociales de nuestra época, como es el caso de su trabajo sobre la inmigración que representa a partir del viajero clandestino.

En su obra resuenan ecos clásicos del ideal mediterráneo, en el que se funden diferentes modelos –desde griegos y etruscos hasta egipcios.

En este Desnudo con
de 1985, la arquitectura y la escultura se fusionan; como si de un mural se tratase, su profundidad hace necesario un elemento arquitectónico que la sustente.