El pintor Nicolaes Eliasz, nacido en Ámsterdam, que utilizó el pseudónimo de Pickenoy, cultivó el retrato individual y de grupo con factura precisa y cuidada y un manejo impecable del claroscuro, como se advierte en esta tabla, y dentro de los modos habituales de la primera mitad del siglo. El haber sido contemporáneo de artistas como Frans Hals (1580/85-1666) y Rembrandt (1606-1669) ha influido en que su obra no haya logrado el reconocimiento merecido.

Para Alfonso E. Pérez Sánchez no hay razones objetivas que impidan afirmar que esta obra es de Pickenoy, aunque tampoco hay nada que obligue a negar su autoría.

Aunque en 1979 Matías Díaz Padrón lo consideró autorretrato del artista, posiblemente debido a que con dicho título aparecía en los inventarios del banco, en 1991 Julián Gállego advirtió que dicha afirmación era imposible ya que en 1623, cuando aparece fechada la tabla, el presunto autor, nacido en torno a 1588, tendría treinta y cuatro años en lugar de los setenta que según la inscripción tiene el caballero: Etatis. Sua. 70 / Anº 1623.

La sobriedad del atuendo, severo y con una gola escarolada un tanto anticuada para la fecha en que está fechada la obra, hace pensar en la posibilidad de que se trate de un hombre de letras, quizás un teólogo o un jurista, como se ha apuntado con anterioridad. Todo el interés se concentra en su noble cabeza, de correctas facciones, escaso pelo entrecano y bigote poblado sobre la estrecha barba.